miércoles, 28 de febrero de 2018

¿Por qué tartamudea mi hijo/a?

Ya algunos de vosotros me habéis preguntado sobre el tema. Os dejo el siguiente artículo para saber cómo actuar:


Hacia los 3 años, cuando el uso del lenguaje comienza a ser más abundante, alrededor de un 5% de los niños tartamudean, es decir, producen repeticiones, bloqueos o prolongaciones de algunos sonidos al hablar. La gran mayoría dejan de hacerlo espontáneamente, pero la actitud de los padres juega un papel importante.

Aún está aprendiendo
Si el pediatra ha descartado alteraciones del aparato fonoarticulatorio (el encargado del habla), que son raras, entonces se trata del típico tartamudeo en el inicio del lenguaje hablado. Ya has notado que le encanta hablar: contigo, con sus muñecos, incluso solo (soliloquios); pero aún no domina bien este sistema de comunicación. 
En ocasiones su cabeza está tan llena de ideas que su lenguaje no es lo bastante veloz, piensa más rápido de lo que habla; otras veces su todavía escaso vocabulario hace que no encuentre las palabras apropiadas para decir lo que quiere. Esto le lleva a cometer con frecuencia esos atropellamientos y esas repeticiones de los sonidos. Es más común en niños que en niñas (5 a 1, aproximadamente) debido a que el cerebro femenino está más especializado en las capacidades lingüísticas y el masculino en las espaciales.

¿Cómo debes reaccionar?
El tartamudeo debido a la falta de soltura desaparece a medida que el peque va ganando práctica, por eso lo mejor es dejarle hablar sin mencionar su dificultad. Por el contrario, una atención excesiva, mostrada al corregirle continuamente, enfadarse o manifestar preocupación, crea en el niño una ansiedad que lejos de solucionar el problema lo agrava.

Algunas actitudes positivas:

No le corrijas, cuanta menos importancia des a su tartamudeo, antes logrará superarlo.
No le interrumpas al hablar ni termines sus frases por él, deja que tarde lo que sea necesario.
No hagas bromas sobre la manera que tiene de hablar.
No le agobies a preguntas; es preferible que hable espontáneamente cuando lo desee.
No comentes su “problema” con otras personas delante de él.
Si el problema de tu hijo se intensifica o no desaparece en unos meses, consulta a un logopeda. A esta edad no es habitual comenzar ningún tipo de terapia, pero te orientará sobre los pasos a seguir...

Cfr. http://www.crecerfeliz.es/Ninos/Desarrollo-y-aprendizaje/Ninos-que-tartamudean