Nanaquë habita en una de las aldeas prehistóricas más pobladas del valle del Norte. Todos sus habitantes viven juntos y obedecen al consejo de ancianos y al chamán que toma las decisiones por el bien común. Su función es la de recolectar frutas y, en ocasiones, cazar algún animal menor. Un día, un jabalí ataca a Nanaquë al ver un intruso en su territorio. Nanaquë no tiene más remedio que lanzarle una flecha y huir, buscando la protección de una cueva donde plasmará en forma de pinturas rupestres sus miedos y deseos.
(cfr. http://quelibroleo.hola.com/nanaque)
No hay comentarios:
Publicar un comentario